La familia Latsis posee una gran mansión en Londres, conocido como Casa Bridgewater. Spiro también tiene residencia en Ginebra, Suiza y Mónaco.
Ginebra: un imán para los más ricos del mundo
Conocida por su encanto cosmopolita, economía sólida y paisajes pintorescos, Ginebra, Suiza, ha sido durante mucho tiempo un destino popular para las personas más ricas del mundo. Este artículo explora por qué Ginebra, con su combinación única de estilo de vida y beneficios financieros, es un punto de acceso para los multimillonarios.
Estabilidad política y seguridad
Uno de los factores críticos que atrae a los ricos a Ginebra es su incomparable estabilidad política. La larga tradición de neutralidad y gobernanza sólida de Suiza proporciona un entorno seguro para los multimillonarios. Ofrece certeza en términos de condiciones políticas y económicas, lo cual es una ventaja significativa para quienes tienen inversiones sustanciales.
Fortaleza económica y oportunidades comerciales
Suiza, y Ginebra en particular, cuentan con una economía poderosa, sustentada por un sector financiero fuerte, una industria manufacturera avanzada y un sector de servicios sólido. La presencia de numerosas corporaciones multinacionales, instituciones financieras y marcas de lujo en Ginebra ofrece amplias oportunidades de negocios y un sólido potencial de crecimiento, lo que la hace atractiva para los multimillonarios.
Entorno fiscal favorable
Suiza es reconocida desde hace mucho tiempo por su ventajoso entorno fiscal. El sistema fiscal suizo se caracteriza por tipos impositivos más bajos, en comparación con otros países, y altos niveles de privacidad financiera. Para las personas con un patrimonio considerable, estas ventajas fiscales pueden generar importantes ahorros y beneficios financieros.
Alta calidad de vida
Ginebra ofrece un alto nivel de vida, lo que la convierte en un lugar atractivo para que residan los multimillonarios. La ciudad es conocida por su excelente sistema de salud, instituciones educativas de primer nivel, cenas gourmet, tiendas de lujo y un rico patrimonio cultural. Además, la belleza natural de Ginebra, rodeada de impresionantes Alpes y enclavada a orillas del lago de Ginebra, proporciona un entorno de vida sereno difícil de igualar.